MI PRIMERA CASA
Fue mi primera casa, la primera que fotografié cuando empecé a interesarme por las casas de indianos.
Entonces sabía poco de fotografiar interiores y me dejé llevar por sus techos coloridos y recargados.
Se trata de La Palmera, una casa de indianos situada en el pueblo de Noriega, concejo de Ribadedeva.
Encuentro muchas pegas a estas primeras fotos, pero sin embargo me atrae bastante la que hice entonces del exterior.
Quizá sea por la luz, pero parece una casa situada donde se acaban las casas -en el límite de la civilización- donde plantar algo bonito es otra forma de cordura, donde una palmera es sobre todo una estandarte que se clava con furia en la tierra.
La obsesión del indiano por regresar.
Recordé mi primera casa hace poco, y tuve que parar para hacer otra foto. La vista frontal es más dura, con el muro marcando las distancias, cerrando el paso.
Tan solo un extremo del visillo -queriendo escapar por el mirador entreabierto- la hace próxima.
En los próximos días el blog se moverá por las cercanías de Noriega, para recordar y descubrir este rincón del oriente asturiano.
Yo soy el pintor que restauró todas esas pinturas haciéndolas tanto es su diseño como el color, igual que las que tenia…
Gracias Alejandro.
Me gusta esta casa Alejandro, con esas bandas laterales, que parecen gallardetes, y la simetria de sus balcones enmarcando ese bonito mirador. Si la memoria no me falla, creo recordar, que en una entrada sobre dormitorios hace varios años, uno de los que nos mostrabas era de esta casa. Recuerdo esos muros azules enmarcando las camas. Haber cuando podemos disfrutar de sus interiores.
Mª Luisa, tienes muy buena memoria, efectivamente incluí el dormitorio de esta casa por lo singular de su diseño, algo exótico.
(A ver). No repaso lo que escribo. y no sé, como se me ha colado el verbo. Aggggg.
No te preocupes Mª Luisa, lo espontáneo no tiene que ser perfecto. Gracias por escribir.
Buenas tardes,esta casa me parece mas espectacular su interior que su exterior,no por eso deja de tener ese señorio indiano.
José, la casa es sencilla en su exterior, probablemente realizada por el maestro de obras Manuel Posada Noriega y sin demasiada ambición arquitectónica. El interior sorprende sobre todo por lo recargado de sus colores, molduras y filigranas.