
EL ESPACIO ENTRE PAISAJES

Te encantará visitar Colombres si no lo has hecho ya. Es un lugar imprescindible para conocer la arquitectura indiana en Asturias.
Si te acercas por allí te recomiendo que continúes hacia el interior. Una curva junto a la última casa de Colombres te dará la oportunidad de contemplar la Casa Roja desde lejos.
A partir de ahí la tierra se vuelve diáfana, cortada en tiras por carreteras que serpentean arriba y abajo esquivando las lindes de las fincas cerradas por muros de piedra.
Es un paisaje que no te esperas, como si hubiera sido trasplantado de otro lugar. Inevitable detenerse para asimilar ese perfecto equilibrio entre nubes, prados y árboles.
Al fondo -pegados a la Sierra- los pueblos de Villanueva y Noriega.
Diseminadas en múltiples caminos aparecen casas de capitalito, donde el dinero reunido en América regresó a la tierra, a la casa que es de indiano y es de labranza, donde sobró la palmera para hacer sitio a la cuadra y al granero.
Aparece también la huella del indiano más pudiente, con aspiraciones de terrateniente, como en el Palacio de la Teja, convertido ahora en recurso turístico.
Seguiremos muy cerca de aquí en las próximas entradas del blog.
Tengo que confesar que he estado solo dos veces en Colombres, y una de ellas, la compartí con Pimiango y la cueva del Pindal, San Emeterio y el monasterio de Tina. Tengo que volver, y recrearme en ese paisaje, que me paso desapercibido por el poco tiempo que dedique.Haber si este proximo verano dedico varios días a esta zona de Asturias, que tengo muy abandonada, y saboreo todo el entorno, y las maravillosas casas indianas, que aqui, y en tus libros nos has mostrado.
Dedicaste el tiempo a la zona de la costa del concejo, que es también muy interesante con todos esos sitios que mencionas. Este otro lado, hacia el interior, es menos conocido, pero tiene casas y paisajes muy interesantes. Merece la pena.