VILLA MARÍA NO TIENE QUIEN LE ESCRIBA
Villa María parece perdida en un lugar que no es el suyo, como si hubiera sido trasplantada a un extraño parque temático.
Está en Cangas de Onís, en el barrio de Contraquil, una zona que perteneció casi en su totalidad a la familia del indiano Constantino González, cuyos parientes construyeron en las inmediaciones otros dos chalés en fechas posteriores.
Villa María (1922) se ha quedado aislada en medio del bullicio, ocupando el centro de una finca destinada a usos hosteleros. A veces me parece un pegote, un hórreo más en medio del prado. Villa María está sola, con su piedra ocre y sus cuatro calas que le salen junto al muro.
Villa María aún se defiende, con su torre en esquina, su robustez, haciendo de trastero en su interior, perdiendo poco a poco la memoria, su razón de ser.
Yo esta casa la descubrí de pequeña (eso creía yo, porque escondida no estaba) y me tenía maravillada. Al pasar los años también estuve en una boda cerca y me hubiera gustado que se celebrara allí dentro…pero claro, no pudo ser…Igual era la misma boda que la de Ramón…;)
Villa María se ha quedado allí en medio, en tierra de nadie, rodeada de coches los días de celebraciones, pero así es el destino. Es una casa muy atractiva.
Ver esa villa me maravilló, visite Xangas de Onis, hace dos año, y esa casonas me enamoraron, son una belleza sin lugar a dudas. También vi un par de ellas, muy bellas en Colunga
Hilda, es una sorpresa ver estas casas la primera vez.
Vaya, ésta no la conocía y la verdad es que es espectacular. Me lo apunto para mi próxima excursión. Una vez más, gracias por descubrirnos nuevos lugares para visitar.
Hola Diana, pues ya tienes una bonita excursión por las casas de Cangas de Onís. Un saludo.
Muy bonita la foto de los grifos. Referente a la casa, estuve hace años de boda en el lugar y al vislumbrar el sitio desde el coche, pensaba que era dentro… ja, ja,.. ¡ qué pena ! . Aunque la pobre no debe estar para muchas visitas, por lo menos aguanta. Un saludo.
Ramón, la casa se ha quedado ahí, casi en medio del aparcamiento. Qué desilusión no poder celebrar la boda en la casa!, aunque ni ocupando los baños podríais haber entrado todos.
Adoro Villa María. Es una señora casa, robusta y con mucho empaque. Me gusta hasta la dignidad que mantiene en su descuidada vejez. Soy un entusiasta del estilo regionalista montañés que define a esta casa. El juego de volúmenes ,de entrantes y salientes, de balconadas y miradores, de bolas y pináculos ,de tejadillos y aleros exagerados , hace que ninguna fachada sea igual y que sea un casa en movimiento. No da sensación de casa estática ,como acostumbramos a ver en la gran mayoría. En Villa María ,incluso ,hay que pensar cual es la entrada principal.Puro dinamismo.Molesta en ella,quizás , el uso de las persianas ,tan impropio de este estilo ¿serán de origen?.
Los baños son auténticos, preciosísimos. Con estas fotografías se entiende ,perfectamente, la expresión «cuarto de baño» .Parecen sacados ,mismamente, de las laminitas de época que tienen todas las madres colgados en sus baños. Como siempre, muchas gracias por esta excursión visual. Es un deleite para los sentidos. Saludos.
Nicolás, no me había fijado en lo de las persianas. Suscribo tus palabras sobre el estilo montañés. Podriamos recordar el Palacio de Sotiello como uno de sus máximos exponentes en Asturias. Yo acabo de ver otra casa de este estilo el sábado, por primera vez, que me ha encantado y estoy intentando conseguir el permiso para fotografiarla y la veremos en el blog. Un saludo.
La verdad que robusta se ve, si viniera un huracán me metería en ella antes que en Villa Concepción, jejeje. ¡Qué suerte conservar los baños originales! Creo que esas estancias suelen ser las más deterioradas (por su uso) o las más modificadas (ay el afán de renovación).
Supongo que al final acabará convertida en hotel, aunque tal vez la estructura de la casa no sea la más adecuada…
Martín, como hotel puede que la casa resulte pequeña. No sé si tienen planes al respecto. Los baños quedaron congelados en el tiempo, incluso había artículos para el aseo personal de hace muchos, muchos años, en una vitrina de uno de los baños.
La verdad que para estar abandonada o usada como trastero, se conserva muy bien (por lo menos exteriormente). ¿Conserva algún interior? Es una pena como muchas de estas casas van quedando olvidadas.
Un saludo
David, abandonada no está, puesto que es de los dueños del complejo hostelero que está allí mismo. Lo que ves de dentro es lo que hay. El dormitorio principal, con unos pocos muebles, los baños originales, y poco más. Muchas habitaciones, y la entrada hasta la escalera, están llenas de cosas almacenadas que no parecen tener relación con la casa. Además estas casas de estllo montañés siempre parecen resultar muy robustas y sufrir menos que otras el paso del tiempo. Un saludo.