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Me parece mágico … por muy olvidadas que estén.
Miryam, gracias. Sí, siempre hay algo de magia en estos lugares abandonados.
Que maravilla de fotos, y que bonito el palacio, soy manchega y desde que descubrimos Colombres y todo su entorno, ya hemos viajado en dos ocasiones para disfrutar. Mi pareja y yo nos hospedamos en Quinta Villanueva, que está enfrente, y desde nuestra ventana se veía el palacio. Quisimos ir allí, pero nos dijeron que era complicado, a mi pareja le hubiese encantado fotografiarlo también. Que penita que esté así, al final se acabará derrumbando. Lástima. Enhorabuena por las fotos!!!
Beatriz, os informaron mal, como explico en el texto hay un sendero ancho que, en un paseo muy agradable, comunica Villanueva de Colombres con este barrio alto del pueblo de Noriega. Si regresas por aquí no te pierdas la visita. Gracias.
Hola Beatriz soy Patricia radico en ciudad de México y soy nieta de la legítima heredera de las propiedades de la familia Ibáñez mi abuelita era Victoria Ibáñez Rivas hija del visconde Indalecio Ibáñez Sordo desgraciadamente no fué a reclamar su herencia y sus primos la hicieron pasar por muerta y se adjudicaron la propiedad siendo que el dueño era su papá el visconde don Indalecio Ibáñez Sordo
Me gusta mucho la labor que haces, Alejandro. Lástima que veamos tantas ruinas ya casi sin nadie que recuerde las vidas que las habitaron cuando se alzaban altivas en una Asturias muy diferente a la actual. Me temo que poco interés particular puede haber en restaurar estos edificios, sobretodo cuando están en un estado tan lamentable como éste, y entiendo que no haya dinero público suficiente para socorrer todo este patrimonio rural. Ojalá me equivoque, pero de momento tu labor de inventariarlo y darlo a conocer ya es, de por sí, encomiable. Un saludo desde Madrid.
Antonio, gracias. Precisamente ayer pensaba, colocando las fotos en esta entrada del blog, cómo sería la vida de esas personas que habitaron La Prida. Quizás aparezca alguna foto de entonces que podamos compartir. Lo de este tipo de restauraciones sigue estando muy difícil. Lo cierto es que de vez en cuando ocurren milagros: un hotel, una residencia de algún tipo, un indiano contemporáneo que decide invertir en el pueblo que le vio nacer. En todos esos casos, el emplazamiento de este palacio me parece envidiable. El pequeño anuncio de venta que tienen pegado en uno de los arcos indica que son 25.000 metros cuadrados. Espacio para hacer de todo. Saludos desde Asturias.
Gracias por el retorno, son magníficas estas fotografías. En verdad siempre hay más, mucho más, que lo que podemos captar en un primer momento sólo con los ojos. Ojalá esta arquitectura tan noble deje de ser pasado y se convierta en presente y en futuro. Hace falta una buena persona que quiera invertir y sepa ver más allá de las grietas y la maleza.
Martín, gracias. El emplazamiento del palacio es extraordinario, en un sitio tranquilo con vistas inmejorables, privacidad y cerca de todo. No se puede pedir más…, bueno sí, una restauración.
El 09/05/1895, fallece en La Prida, parroquia de Noriega, María de las Mercedes de Quintanar
Era habitual todos los veranos en su casa de La Prida, Noriega, Mercedes Ibañez de Feixas, con sus hijos, ella residía en Santander, en 1904 debió estar muy concurrida porque además de Mercedes y sus hijos, ese verano también fueron a La Prida, Maximina de Dios de Corral y sus hijos,
Gracias José, cuando leo estas cosas y recuerdo el estado del palacio, me da más pena todavía.