TARDE DE VIERNES
Hay alguna casa, muy pocas, que se mantiene inalterada, impecable, tal y como el indiano la dejó. Esos descubrimientos tan especiales, como el de este viernes tarde, me producen una fuerte emoción. Fueron más de tres horas intensas para completar el reportaje de la casa de José Menéndez Viña, El Noceo (Somao), el indiano que emigró a Caibarién (Cuba) a mediados del siglo XIX y abrió camino para todos sus parientes y amigos que también harían fortuna y levantarían sus casas en Somao (La Casona, El Marciel, La Casa Amarilla,…)
El Noceo es una casa luminosa, de grandes balcones, miradores y galerías. Fue ampliada y reformada a partir de la casa familiar en la década de 1880, al regreso del indiano. A su alrededor hay varias fincas que pertenecieron a la familia y que albergaban dependencias auxiliares (cochera, pajar, casa de caseros…)
El jardín tiene varias entradas diferentes, detalles como estos son la premonición de lo que alberga el interior.
La vista desde el mirador del piso superior. Desde el centro de la imagen y hacia la derecha puedes ver la Casa Amarilla, El Marciel, además de la iglesia, el antiguo cine y la escuela, obras financiadas por indianos.
¿Por qué no te enseño la casa por dentro?. Aún es pronto, las fotos están sin seleccionar (van para un libro), pero quería contarte que he vuelto muy impresioado.
Por ahora me quedo aquí, en la aldaba de la puerta. La foto no puede reflejar su tamaño real (mayor que el de una mano de verdad).
Gracias Alejandro,sólo quería contaros que las antiguas cocheras del Noceo hoy se han convertido en un bonito hotel rural que se llama La Cochera de Somao,en su página encontraréis muchas fotografías,los dueños Paloma y José Antonio,hicieron un buen trabajo de restauración,la galería es un elemento añadido recientemente a la construcción original.Como curiosidad os cuento que Paloma es familia del Noceo y también mía..
Te cuento Alejandro que mirando en mi archivo tengo unos planos de El Noceo,referentes a la instalación de calefacción en papel vegetal ,espero algún día poder enseñártelos,muchos saludos a todos.
Ignacio, ya sabes que me encanta ver todos esos tesoros que guardas de tu familia. Un abrazo.
Hola: con tu permiso Alejandro quería contar que las antiguas cocheras del Noceo hoy son un bonito hotel rural,con mucho éxito,no sé si se puede dar el nombre.Un saludo a todos..
Por supuesto Ignacio, yo nunca he estado pero tengo buenas referencias. Saludos.
Esa aldaba destila delicadeza por todos lados. muy bonita la foto. Saludos.
Ramón, es una premonición de lo que hay dentro.
Las fotos de esta entrada son, más que bonitas, «preciosistas». A cuál más . Pocas estampas pueden haber tan bucólicas como la que has capturado desde los miradores de forja del Noceo : prados verdes , hortensias en plena flor, el ramillete de casas distinguidas de Somao y el cantábrico de telón de fondo estrechando la mano con un inusual cielo celeste. No creo que haya mejor medicina que ese mirador. SALUDOS
Nicolás, me gusta el término bucólico, forma parte del sentimiento al asomarse a esos miradores…, no sé si es medicina o veneno.
Qué curioso, no me había dado cuenta de la manzana y de la llamativa pulsera, muy bien equipada, la verdad!
Lo de la pulsera también es bastante singular.
Tenía noticias de que se conservaban muy bien los interiores aunque alguna vez vi una foto de un salón y las pinturas no tenían la calidad de las de La Casona. Espero ansioso ese libro para maravillarme. Para cuando si no es indiscreción, (para poder controlar la impaciencia jajaja). Como te encantan las aldabas, algún día tendrás que mostrar tu favorita!
David, como no tengo paciencia ni espacio ni dinero para las colecciones de verdad, tengo una colección virtual de aldabas (en fotografía) bastante grande. En cuanto a tamaños, ésta de El Noceo es muy grande y llamativa. Curiosamente la mano sujeta una manzana y no una bola como es habitual. Sobre el libro, me encantaría salir antes de navidades, ya sabes que es una fecha muy apropiada para tirar de las ventas, pero no sé si llegaremos. Las pinturas de El Noceo están sólo en los pisos superiores, y son dibujos decorativos sin gran interés artístico. La planta baja tiene los techos bajos, al tratarse de una reforma de la casa familiar del indiano. Lo verdaderamente meritorio es la conservación del mobiliario, recuerdos, cuadros, espacios, y la atmósfera «fin de siglo».
Yo tambien estoy ansiosa por ver el interior de esta casa, que si a ti te ha entusiasmado, tiene que ser una maravilla. El exterior es muy bonito y armonico, y la galeria con esos cristales de colores muy original. Me imagino que los dueños no serán supersticiosos, porque ese hermoso mirador tiene trece ventanas, y sin embargo, la casa permanece inalterable con el paso del tiempo. En otro orden de cosas: Que guardes las fotografias para un nuevo libro me suena a musica celestial; a ver cuando ve la luz, junto con el de Palacios II, al que tengo muchas ganas de echarle la vista encima. Un saludo.
Gracias Mª Luisa, qué observadora. Sí, la casa me encantó y me sorprendió, incluso transmite una sensación de mucha naturalidad, no como si fuera un museo, sino como una casa vivida.
Hola Alejandro,acabamos de llegar a Madrid,en avión,no en barco como los indianos,y menuda sorpresa nos hemos llevado Alma y yo,enhorabuena y felicidades,ya veo que pudiste fotografiar El Noceo,espero nos cuentes a todos tus impresiones sobre la casa y esperamos a que salga el libro para comprarlo,es una casa muy bonita,verdad?.Estoy seguro que tienes mucho que contarnos a todos tus fans que somos multitud.Hasta pronto.
Bienvenido Iñigo, te agradezco enormemente el contacto con Carlos para fotografiar la casa, ha sido una sorpresa ver esos interiores. Un abrazo.
Oh!! ahora ya nos has dejado con la miel en los labios, estaré esperando alguna fotografía de esos interiores, con la cantidad de casas que tu has visto si has venido impresionado es que debe de ser espectacular. Un abrazo, Esther
A veces ocurre, que una casa que no es la más espectacular por fuera, resulta una joya en el interior. Un abrazo Esther.
Lo dicho, Alejandro, tu blog es una joya. Qué manera tan elegante de acercarnos otras realidades, otras intimidades, otros mundos… Para mí es de «comunión diaria». Un beso!
Gracias Regina, espero que sigas disfrutando, un abrazo.