MIENTRAS TANTO

Podría dar vueltas a los Oscos sin cansarme nunca (ya lo hago), podría perderme por sus carreteras (ya lo he hecho), y podría descubrir todos y cada uno de sus pequeños rincones (estoy en ello).

Podría escuchar sin pausa a sus gentes, sus historias únicas de supervivencia y arraigo y, al quedarme solo, volver la vista a un paisaje intrigante, a los sonidos de la naturaleza en estado puro, a la libertad de olvidar el tiempo.

Mientras tanto, mientras regreso, TODO BIEN.