LA VISTA HERMOSA
El indiano tuvo buen ojo, la situación de la casa es privilegiada, quizá por eso la llamó Vista Hermosa.
Sobre un promontorio que domina las marismas, el indiano Rosendo Villaverde construyó en 1877 esta casona. Muchos años atrás había partido del cercano pueblo de Fuentes (Villaviciosa) en la goleta Ciudad de Gijón camino de Cuba. Allí se enriqueció con varias plantaciones en compañía de sus hermanos Manuel y Ramón.
Al volver tenía un plan trazado para su retiro. Casó con su sobrina, compró grandes extensiones de marismas junto a la Ría de Villaviciosa, y buscó un sitio que dominara sus posesiones para levantar su nuevo hogar.
Poco a poco, según fueron naciendo sus 4 hijos, organizó su pequeño mundo para que no faltara de nada: horno de pan, cochera, palomar, lagar, panera de 12 pegollos, gallinero, y hasta una casa de baños al pie de la Ría para distraer el tiempo, antes del cocido y la fabada que se preparaban en la casa todos los días del año.
Vista Hermosa, situada en Tornón, concejo de Villaviciosa, es una gran casona de 440 metros cuadrados por planta. En el bajo había un granero y una capilla, pero los interiores han sido totalmente reformados tras la partición de la herencia. La fachada posterior mira a la Ría, reclamando su importancia con una gran galería que fue de madera.
Otra de las fachadas, frente a un jardín de agapantos. Cualquiera de sus fachadas es un espléndido mirador sobre el paisaje.
El servicio vivíamos en otra casina al lado. Cada miembro de mi familia lo vivió a su manera, pero para mi madre y para mi que soy la pequeña, fue muy bonito poder disfrutar de semejante entorno. Era maravillosa la llegada del verano. Se llenaba de niños y adolescentes disfrutando con los caracoles y las lagartijas, todos jugábamos juntos de pequeños, al crecer ya la historia se complicaba. Y sí que cabían, ya lo creo.
Saludos, me ha encantado ver las fotos del interior. Pena la hermosa galería mirando a la ría que no habrás podido sacar. Gracias por estos recuerdos.
Gracias Blanca, siempre agradezco mucho estos recuerdos vinculados a las casas.
La barroca verja de entrada contrasta con la austeridad de esta bella casona.
En la fachada principal los agapantos conducen al zaguán oscuro pero acogedor y encima esos miradores que contemplan la amplia vista verde, gris, azul …
Detrás, la típica galeria acristalada , refugio intimo para días lluviosos, desde la que se adivina la ría cercana. Y en el oeste, un hermoso prado ajardinado que hace compatible la sencillez del primero con la belleza de las flores sabiamente dispuestas.
Que orgulloso estaría el indiano!, Su buen gusto permanece en el tiempo…
Elena, parece que conoces muy bien la casa. Gracias por comentar. El emplazamiento de la casa es maravilloso.
¡Que sobriedad!… pero menudas vistas,… desde luego acertó el dueño de la casa en la ubicación, si señor…La foto del portalón abierto, como ya se ha dicho, es espectacular, tanto por las vistas que vemos al fondo como por ese maravilloso artesonado de madera…¡que preciosidad!, pero también me ha gustado, y mucho, la primera foto, la piedra y la barandilla en primer plano y el majestuoso paisaje asturiano ofreciéndose al fondo…bajo un cielo amenazador. Se pierde la vista en el infinito. Creo que en su día debió de ser de esas casas en donde lo mejor estaba reservado en su interior…
Lena, yo me imagino la casa en aquella época llena de gente. Aún siendo muy grande casi se quedaría pequeña con tanta familia alrededor del indiano, más el servicio, etc. Las vistas te puedo asegurar que son preciosas, en todas las direcciones.
Una casa muy interesante. Es cierto que los primeros indianos buscaban algo más sobrio, cercano a la nobleza local que habían conocido antes de marchar. Estas casas habrían parecido muy sosas a los indianos del S.XX, que buscaban torres y florituras, jeje. Con ese tamaño por planta entiendo que tenga patio central… ¿conserva la estructura original? ¿Madera? Muchas gracias!
Martín, hasta donde he podido ver, la distribución ha sido alterada (por la división de la herencia) y se han cambiado la mayor parte de ventanas, galería, etc. Se conserva la escalera y poco más.
Soberbia la foto del portón abierto…Me gusta por la vida !!! Parece el escenario propio de algún palacio renacentista de la Toscana italiana. Pero no… , el paisaje de fondo delata que es un lugar mucho más bonito … por el norte de España. Ahí están puertas, baldosas, friso azulejado y techo con molduras y pinturas , después de 135 años… Parecen estar inalterados desde entonces. Lo bueno y bello es ajeno a las modas y al tiempo. SALUDOS
Gracias Nicolás porque a mi también me gusta esa foto concretamente. Me pasó desapercibida cuando la hice y ahora me encanta contemplar ese conjunto, resulta evocador.
Rosendo Villaverde, solicitaba a traves de Aquilino Suárez Barcena, en los años 1859 y en 1861 permiso para levantar un muro de sostenimiento en las marismas de Linares
José, debió de ser el tiempo en que regresó de Cuba. Rosendo Villaverde había nacido en 1818 así que imagino que se fue a América a principios de los años 30.
Vista Hermosa , realmente esas puertas de intenso verde nos invitan a traspasarlas como si fuera un sueño , es Asturias , repleta de color que no sacia nuestros sentidos. Cada rincón nos lleva a otro sin perdida.
Maria Jesús, esas puertas son muy grandes, como para entrar a caballo hasta el patio central de la casa.
Esta es una de esas casonas que siempre está seria. Es una pena lo de los interiores porque las pinturas y molduras de la entrada ya predecían algo. aún así las vistas son muy bonitas.
David, la casa de dividió entre dos familias, incluso partiendo el gran salón por la mitad, y ya no queda nada de lo que fue.
A esta casa , le veo mucha sobriedad…. debe de tener unos muros importantes,… seguro que no se la lleva ni un huracán. Me gusta el detalle de la barca y ver que la reja tiene muy buen aspecto . la verdad es que es una bonita vista la que tiene. Saludos a todos.
Ramón, ya sabes que en otras casas de esta época que hemos visto, anteriores al cambio de siglo, la sobriedad suele dominar. Se impone una casona grande y fuerte a la intención arquitectónica.