LA CASA VACÍA
Por casualidad, terminé mi Agosto de intenso «trabajo de campo» frente a esta casa sin nombre.
Una construcción sin fondo y sin horizonte cerca de Noriega, concejo de Ribadedeva. Hueca, sin ventanas -con el muro vencido- y la fecha de 1877 colgando de su sobriedad.
Una fecha es suficiente para engancharnos, tan potente es la imaginación.
En el comienzo de esta nueva temporada del blog reconozco que lo que más me cuesta es ponerle palabras.
Las imágenes están ahí, solo tengo que ir a por ellas y esperar la luz.
Traigo el zurrón lleno de fotos y notas. Las palabras saldrán, con sacacorchos.
Una mas a lo largo y ancho de Asturias. Casas, que en su día cumplieron diversos cometidos, pero que, el transcurrir del tiempo las ha condenado al olvido.
Me alegra ver, que has vuelto, y estoy deseando ver, todas las fotos e historias, que has ido acumulando durante este largo verano.
Bienvenido Alejandro ! Estoy loca por ver todo lo nuevo que nos traes esta temporada.
Abrazo
Gracias Sara, yo también tengo ganas de darle forma y ponerlo aquí. Un abrazo.
Qué pena de casa,es bonita ,con fecha y todo,pero se cae a pedazos,no sé si sale más caro reconstruirla o más barato hacer una nueva,imagino que será cuestión de tiempo que termine todo en un montón de escombros,y a lo mejor tiene buena finca.Quizá fue una casa de labranza,o una casa solariega ,en fin ,una pena.
Ignacio, sí parece una casa sobria pero con buenos muros, construida para durar y para llevar una vida de trabajo. Vivienda, almacén y cuadra.
¡Qué bonitas las imágenes y a la vez qué tristes! No creo que aguante muchos inviernos ese tejado. Podríamos imaginar todas las historias que vivieron esas piedras, ojalá tengan un nuevo camino. ¡Gracias!
Martín, la zona donde está casa es una extraña mezcla entre segundas residencias de veraneo con urbanizaciones de chalés y muchas antiguas casas desmoronándose en las inmediaciones. Es una pena que no haya más rehabilitación de casas hermosas.
Estamos en lo de siempre: la desidia y mala gestión. Cuando ya no quede nada que proteger nos lamentaremos viendo fotografías. Esto ya pasa cuando vemos fotos de los años 50 o 70 antes de que derribaran casas maravillosas (o hicieran malas reformas). La rehabilitación debería ser una prioridad superior a las nuevas urbanizaciones. Hay una página que me encanta (architectural revival) que pretende precisamente fomentar la conservación arquitectónica «creando lugares que tus padres reconocerían y de los cuales puedan estar orgullosos tus hijos». Hablando de todo esto… últimamente hay actividad en «La Concepción», un contenedor con escombros y muebles destrozados y algunos albañiles. No sé qué será.
Martín, gracias por la noticia sobre La Concepción. Como dices, habrá que ver si son remiendos o si se van a poner a la ingente tarea de rehabilitar.