AMANECERES EN LA PLAYA DE SAN LORENZO
En primavera siempre tengo la sensación de que los amaneceres se producen a cámara lenta.
Debe de ser por la hora tan temprana -sobre las seis- en la que uno todavía no tiene todos sus sentidos a pleno rendimiento.
Uno de los privilegios de vivir en la costa es poder acercarse a ver amanecer, y Gijón tiene la playa de San Lorenzo como un buen anfiteatro para disfrutarlo.
En esta época del año, el sol aparece sin obstáculos por la línea del horizonte.
GIJÓN MIRANDO AL MAR
Crea efectos de luz y reflejos que son diferentes cada día, abundando los tonos rosáceos.
Aunque hay muchos puntos donde observarlo, la foto que abre esta entrada fue tomada en una pequeña calle -Rectoría- que desemboca en la playa.
Tiene alguna significación para este blog puesto que el edificio en primer plano es la casa de Celestino García (1902), obra del arquitecto Manuel del Busto.
En otras ocasiones, el amanecer se tuerce y una espesa niebla encierra la ciudad como si le hubieran puesto un calcetín.
La siguiente imagen es a unos metros de la playa, en el río Piles, que sortea el parque para desembocar en la misma playa.
En el lado opuesto, junto a la Iglesia de San Pedro, la perspectiva de la ciudad es muy diferente.
Da la la sensación de que el agua fuera a rebosar, inundándolo todo. A veces ocurre, el Mar Cantábrico tiene mucho genio.
Éstas y otras fotos forman parte del libro Gijón, Mirando al Mar, un pequeño homenaje a la ciudad y a sus paisajes.
Muy lograda. Por lo que he apreciado, la cámara Hasselblab H3D-39, es prohibitiva! para un aficionado, que además no quiere llevar algo voluminoso, como es mi caso. Un saludo.
Alberto, ya no tengo esa cámara, que resultó ser un desastre de averias y demás, aunque esta foto sí está tomada con ella. Yo creo que todos los que nos gusta la fotografía queremos ir ligeros de equipaje, aunque no siempre es posible. Un saludo.