CIPRIANO EN EL PARQUE
Iba a hacer sólo un pequeño apunte pero se me ha ido la mano recordando Castropol y evocando su parque romántico.
El escultor Cipriano Folgueras (1863-1911) fue el encargado de realizar el monumento en homenaje al marino Fernando Villaamil, muerto en la guerra de Cuba, que se inauguró en el verano de 1911 junto con el resto del parque que lleva el nombre del indiano Vicente Loriente Acevedo.
La descripción al pie del monumento dice así:
“Está inspirado en las columnas rostrales de la antigüedad romana que con la columna y el basamento en forma de proas conforma un perfil semejante al de un ancla. Representa el instante en que Villaamil cae muerto acompañado por una madre, que es España, desplegando la bandera de la patria. La columna se remata con la representación del planeta tierra sobre el que se sienta el genio de la navegación que con una mano, empuña la rueda del timón y con la otra, alza la fragata Nautilus en la que el marino había dado la vuelta al mundo que tanta fama le dio”.
Nota: ya pudiste admirar ayer la maestría de este escultor.
Nota 2: acabo de darme cuenta; Cipriano murió el mismo año que se inauguró su obra, 1911.
Bonitas fotografías pero quiero hacer una mención especial a la tercera de las expuestas. No sé si ha sido esa tu intención Alejandro, pero ¿te has dado cuenta del efecto tan sugerente y misterioso de la silueta de esas ramas con el contraste del cielo?. No sé si es mi imaginación o lo has buscado de forma expresa pero parecen figurillas que intentan acercarse a la escultura central…un poco onírico y mágico…no sé como explicarlo…muy en plan Tim Burton. Ya me contarás. A mi me gusta mucho.
Lena, no sé si busqué ese efecto, pero recuerdo que era una tarde de neblina que enfriaba el aire por momentos, y las siluetas de los árboles podados formaban un conjunto irresistible…
Menos mal que este monumento sobrevivió a la Guerra Civil. Otros fueron fundidos y hoy sólo nos queda verlos en fotografías. Me ha recordado a la columna-monumento a José López que hay en Comillas.
Martín, tu comentario me ha recordado la cantidad de gente, dueños de casas de indianos y de palacios, que menciona los destrozos irreparables que se produjeron durante la Guerra Civil en este patrimonio, y me ha hecho pensar muchas veces lo que serían esas casas y palacios sino hubiera pasado por ellas la devastación de una guerra.
Tampoco hay que olvidar que Villamil, que invento un tipo de barco de guerra que todavía presta servicio en alguna marina del mundo que es el destructor. Era el jefe de la flotilla de destructores en la que murió en la batalla de Santiago de Cuba, un verdadero desastre para la Marina Española. Probablemente uno de los mejor marino que tenía la Marina Española en sos momentos, incluso hizo proposiciones para aquella situación que no fueron aceptadas, como pudo ser la de atacar con los destructores Nueva York, dado que en su vuelta al mundo al llegar a Nueva York vio unas defensas muy endebles.
Gracias por la información. ¿Atacar Nueva York?. Está claro que el hombre no se arredraba ante nada. Debía de ser un personaje de gran prestigio en su época, a tenor de los homenajes que le rindieron tras su muerte.